“Lo malo de poner a una astrónoma en un consultorio sentimental es que puede hilar muy fino. Aquí, el inocente comentario “eres un sol” permite a Erasmus elaborar una tesis sobre lo apropiado de la frase porque, en realidad, nuestra estrella es una estrella muy normalita… Y porque, si bien gracias al Sol existe vida en la tierra (y eso es bueno), el Sol también presenta etapas de actividad que pueden freír nuestros satélites (malo), aunque también las partículas cargadas procedentes del Sol producen las auroras polares (bueno)…
En este artículo analizamos por qué nuestra estrella, en apariencia tan tranquila, puede ser tan ¡¡¡¡¡¡ERUPTIVA!!!!!!! e ¡¡¡¡¡¡¡IMPREVISIBLE!!!!!!!:”