No sorprende que Tesla escogiera la exploración marciana para uno de sus videoblogs. A fin de cuentas, la comunicación con posibles civilizaciones extraterrestres constituyó un interés constante a lo largo de su vida, como él mismo declaraba en un artículo en la revista Collier´s Weekly en 1901: “El deseo de saber algo de nuestros vecinos en las inmensas profundidades del espacio no surge de la curiosidad ociosa, ni de sed de conocimiento, sino de una causa más profunda, y es un sentimiento arraigado en el corazón de todo ser humano capaz de pensar”. Al igual que en el Teslablog de la energía del futuro, en este episodio Tesla muestra un excepcional conocimiento de la historia de la exploración del planeta rojo e incluso nos permite conocer sus sentimientos al respecto: la frustración ante las imágenes de la Mariner 4 (“¡Maldita Mariner 4!”) que pusieron fin a la idea de un Marte frondoso o la emoción ante las primeras imágenes de los cauces secos marcianos o ante la llegada de las naves Viking; y, por supuesto, su sólida determinación por alcanzar lo que parece inalcanzable. Quizá la brevedad que exige el formato audiovisual impide a Tesla realizar una descripción más pormenorizada de esa veintena de misiones que han sobrevolado o aterrizado con éxito en el planeta vecino (porque otra veintena ni llegó a despegar, se perdió por el camino o se estrelló contra la superficie -algo que, como bien señala Tesla, a él nunca le hubiera pasado). Por ejemplo, solo se refiere muy brevemente a la soviética Mars 1, la primera misión que intentó acercarse a Marte y que, tras un exitoso despegue en 1962, envió a Tierra numerosas radiotransmisiones; sin embargo, tras recorrer más de cien millones de kilómetros, sufrió algún problema técnico y las comunicaciones se perdieron. Lo que sí hace Nikola, muy acertadamente, es describir qué supusieron las imágenes de la Mariner 4: “un verdadero jarro de agua fría”. La superficie del planeta, plagada de cráteres de impacto, presentaba un desafortunado parecido con la de la Luna. Los cráteres apuntaban a una superficie muy antigua e inerte, que parecía no haber experimentado cambios en miles de millones de años y evidenciaban la carencia de energía interna, pues de lo contrario las huellas antiguas hubieran sido borradas como ocurre en la Tierra. Los datos de la Mariner 4 confirmaron también la bajísima presión atmosférica marciana, y su combinación con las observaciones en tierra demostró que no solo la atmósfera se componía de dióxido de carbono sino que también los polos, presuntamente cubiertos de agua helada, se hallaban recubiertos en realidad de hielo seco o dióxido de carbono sólido.
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Contenido
- El pensamiento científico, una forma de plantear y solucionar problemas y su incidencia en la transformación de la sociedad.
Procesos de desarrollo de aprendizaje
- Describe problemas comunes de la vida cotidiana explicando cómo se procede para buscarles solución, conoce y caracteriza el pensamiento científico para plantearse y resolver problemas en la escuela y su cotidianeidad.
- Indaga en diferentes fuentes de consulta las aportaciones de mujeres y hombres en el desarrollo de la Física y su contribución al conocimiento científico y tecnológico a nivel nacional e internacional para valorar su influencia en la sociedad actual.
- Publicado el
- 11 julio, 2024
Tipo de contenido:
video
Plan de estudio:
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Autor:
IAA - Comunicación
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